“Hasta un 69,2% de la población mundial del personal dedicado al sector salud sufre el Síndrome de Burnout”. En la sociedad actual, es común que experimentes altos niveles de estrés y agotamiento debido a las altas exigencias laborales y personales. Uno de los términos asociados con esta problemática es el síndrome de burnout. Este síndrome se caracteriza por una sensación de agotamiento físico, mental y emocional, y puede tener un impacto negativo en la salud y el bienestar de las personas que lo padecen. En este artículo, exploraremos cómo una adecuada alimentación y nutrición pueden desempeñar un papel clave en la prevención del agotamiento y la optimización de la salud.
Si eres de los que buscan una solución eficaz a medida, por favor, estás a un sólo clic de mejorar tu situación. ?
Índice
El Síndrome de Burnout: ¿Qué es?
2.1 Definición y características del síndrome de burnout
2.2 Impacto negativo en la salud y el bienestar
Síntomas del Burnout
3.1 Áreas sintomatológicas del síndrome de burnout
3.1.1 Síntomas emocionales y afectivos
3.1.2 Síntomas cognitivos
3.1.3 Síntomas actitudinales
3.1.4 Síntomas comportamentales
3.1.5 Síntomas fisiológicos
Consecuencias del estrés en el desarrollo del síndrome del trabajador quemado
4.1 Tipos de estrés y sus características
4.1.1 Estrés agudo
4.1.2 Estrés agudo episódico
4.1.3 Estrés crónico
La importancia de la alimentación y nutrición en la prevención del síndrome de burnout laboral
5.1 El papel de una dieta equilibrada
5.2 Consumo adecuado de vitaminas y minerales
5.3 Regular el consumo de cafeína y azúcar
5.4 Alimentos que promueven la salud mental
Hidratación para prevenir el síndrome del desgaste profesional
Actividad física para prevenir el Síndrome de Burn Out
7.1 Incorporación de pequeñas actividades físicas en la rutina diaria
7.2 Adaptación del entorno laboral para fomentar la actividad física
7.3 Organización de actividades deportivas en el ámbito laboral
Preguntas frecuentes (FAQs)
8.1 La alimentación como prevención del síndrome de burnout
El Síndrome de Burnout: ¿Qué es?
Primero de todo, el síndrome de burnout es un estado de agotamiento físico, mental y emocional que resulta de una exposición prolongada al estrés laboral o personal. Se caracteriza por síntomas como la fatiga constante, la falta de motivación, la disminución del rendimiento, la irritabilidad y la pérdida de interés en las actividades cotidianas. Este síndrome puede afectar negativamente a la calidad de vida y la salud general de una persona. Es decir, es más fácil que ciertas enfermedades, como la obesidad, la diabetes tipo 2, la hipertensión, el colesterol, dislipemias o las enfermedades cardiovasculares, se hagan contigo.
Así mismo, la trascendencia y determinación que tienen los factores psicológicos en la producción y mantenimiento de la obesidad es fundamental. Ya que estos componentes pueden precipitar y perpetuar el consumo excesivo de alimentos.
Síntomas del Burnout
Además, el SBO comprende una serie de alteraciones que se han agrupado en cinco áreas sintomatológicas:
- Emocionales y afectivas: cansancio o hastío emocional, irritabilidad, odio, nerviosismo, agobio, tristeza, disgustos, enfado, desencanto, angustia, sentimientos de culpa, etc.
- Cognitivas: baja autoestima, baja realización personal en el trabajo, sensación de fracaso, sentimientos de impotencia para el desempeño del rol profesional, sentirse contrariado, sentir que no valoran su trabajo, percibirse incapaz para realizar las tareas asignadas, pensar que no puede abarcarlo todo y que trabaja mal, inseguridad, sentir falta de control…
- Actitudinales: cinismo, sentirse harto/a, despersonalización, apatía, impaciencia, hostilidad, suspicacia, falta de deseos para seguir trabajando, irresponsabilidad, frialdad hacia los pacientes, culpar a los demás de tu situación, etcétera.
- Comportamentales: quejas constantes, aislamiento sociolaboral, aumento de accidentes, consumo de tranquilizantes, consumo exagerado de café, té, tabaco, conductas agresivas hacia los clientes o pacientes…
- Fisiológicas: cansancio y fatiga, dolor de cabeza, insomnio, úlcera de estómago o desórdenes gastrointestinales, diarreas, dolores musculares de espalda y cuello, trastornos cardiovasculares; en las mujeres pérdidas, de ciclos menstruales, etc.
Consecuencias del estrés en el desarrollo del Síndrome del Trabajador Quemado
Según la American Psychological Association (2016), hay diferentes tipos de estrés: estrés agudo, estrés agudo episódico y estrés crónico, cada uno con características, síntomas, duración y enfoques de tratamiento específicos. A continuación, te describo estos tipos de estrés implicados en el Burnout:
- Estrés agudo
Es la forma más común de estrés. Surge de las presiones y exigencias recientes del pasado (por ejemplo, la pérdida de un contrato importante, un despido…) y las demandas anticipadas del futuro cercano (por ejemplo, un plazo de entrega). Aunque puede ser darte un puntito de activación y hasta ser emocionante en pequeñas dosis, resulta agotador cuando es demasiado intenso. Como es a corto plazo, no suele causar daños importantes asociados con el estrés prolongado.
Así mismo, los síntomas más comunes incluyen: angustia emocional (una combinación de enfado, irritabilidad, ansiedad y depresión), problemas musculares (como dolores de cabeza tensos, dolor de espalda y tensión muscular) y problemas estomacales e intestinales (como acidez de estómago, diarrea y estreñimiento). En este punto nos podemos encontrar algunos casos de síndrome del intestino irritable. Asimismo, el estrés agudo puede afectar a cualquier persona y es tratable y manejable.
Estrés agudo episódico
Se refiere a las personas que siempre van con prisas pero constantemente llegan tarde. Asumen muchas responsabilidades y tienen dificultades para organizar las metas o exigencias que se imponen a sí mismas. Estas personas suelen estar agitadas, tener mal genio, ser irritables, ansiosas y tensas.
Otra forma de estrés agudo episódico surge de la preocupación constante y del pesimismo excesivo frente a situaciones cotidianas. Los síntomas de este tipo de estrés incluyen dolores de cabeza persistentes, migrañas, hipertensión, dolor en el pecho y enfermedad cardíaca. Algunas personas no ven nada malo en su estilo de vida y rasgos de personalidad arraigados, y culpan a otros por sus problemas… Aunque pueden ser resistentes al cambio, el alivio de los síntomas puede motivarlas a buscar tratamiento y recuperación.
Estrés crónico
Es un tipo de estrés agotador que desgasta a las personas día tras día, año tras año. Destruye el cuerpo, la mente y la vida de manera prolongada. Surge cuando una persona se siente atrapada en una situación deprimente sin ver una salida. El estrés crónico es resultado de exigencias y presiones implacables durante periodos aparentemente interminables. Las personas se acostumbran a este estrés y lo consideran normal, olvidando que está presente. Así mismo, el estrés crónico puede tener consecuencias graves como suicidio, violencia, enfermedades cardíacas e incluso cáncer. Los recursos físicos y mentales se agotan debido a este desgaste a largo plazo.
Además, la presión laboral se intensifica en actividades que implican más responsabilidades, toma de decisiones importantes y alteraciones de los ritmos biológicos, especialmente los circadianos. Esto afecta tu moral y salud psicobiológica, generando un alto nivel de estrés que influye en todas las áreas de tu vida, incluyendo las conductas alimentarias y las actividades relacionadas con ellas (Maslach et al., 2001; Mohren et al., 2003).
En el artículo anterior estuvimos hablando sobre las mejores estrategias para aumentar tu longevidad, échale un buen vistazo.
La Importancia de la Alimentación y Nutrición en la Prevención del Síndrome de Burnout laboral
Ahora bien, una alimentación adecuada y equilibrada desempeña un papel fundamental en la prevención del síndrome de burnout. Los nutrientes que consumes tienen un impacto directo en tú nivel de energía, estado de ánimo y capacidad para hacer frente al estrés. A continuación, te presento algunas pautas nutricionales que pueden ayudar a prevenir el agotamiento:
1. Mantener una Dieta Equilibrada
Este es el más básico pero también más importante de los consejos que te tengo que dar hoy. Una dieta equilibrada debe incluir una variedad de alimentos de todos los grupos alimenticios: frutas(no me valen zumos de la máquina del pasillo…), verduras(no vale con la hojita de lechuga que lleva tu hamburguesa del Mc Auto…), granos enteros, proteínas magras y grasas saludables. Estos alimentos proporcionan los nutrientes necesarios para mantener un equilibrio en el organismo y promover un estado de bienestar general.
Para saber realmente cuál es el tipo de alimentación que necesitas en tu situación actual, la mejor opción es que un nutricionista profesional te asesore.
2. Consumir Suficientes Vitaminas y Minerales
Ahora vamos a concretar un poco más. Las vitaminas y minerales desempeñan un papel crucial en el funcionamiento adecuado del organismo. Es importante incluir alimentos ricos en vitaminas B, C, D y E, así como minerales como el magnesio y el zinc. Estos nutrientes pueden ayudar a reducir la fatiga, fortalecer el sistema inmunológico y mejorar el estado de ánimo. Por lo tanto, el consumo de alimentos frescos y poco procesados es fundamental en este punto.
3. Regular el Consumo de Cafeína y Azúcar
Por otro lado, si bien el consumo moderado de cafeína puede proporcionar un impulso de energía temporal, un consumo excesivo puede provocar ansiedad y dificultades para conciliar el sueño. Del mismo modo, el consumo excesivo de azúcar puede llevar a fluctuaciones en los niveles de energía(picos de glucosa en sangre) y afectar negativamente el estado de ánimo. Es recomendable limitar la ingesta de alimentos ultra procesados ricos en azúcar y optar por alternativas más saludables.
4. Incorporar Alimentos que Promuevan la Salud Mental
Así mismo, algunos alimentos pueden tener un impacto positivo en la salud mental y ayudar a reducir los niveles de estrés y ansiedad. Por ejemplo, los alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, como el salmón y las nueces, pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo y reducir la inflamación en el cerebro. Además, alimentos como los plátanos, las espinacas y el chocolate negro(con al menos un 80% de pureza), contienen nutrientes que estimulan la producción de serotonina, conocida como la hormona de la felicidad.
Hidratación para prevenir el Síndrome del Desgaste Profesional
Por otra parte, la hidratación también es fundamental para un estado de salud óptimo. En especial, cuando tenemos una carga de trabajo encima que nos supera, mantenernos hidratados e hidratadas, nos ayudará a evitar jaquecas. calambres(sobre todo por el desbalance de minerales en los músculos). fatigas, y otros signos y síntomas incómodos. Tener una botella grande(2 litros mínimo) en el escritorio o lugar de trabajo siempre es una estrategia ganadora. Si no eres muy de agua “sin nada” podrías echarle una rodajitas de pepino y limón para darle sabor y encima añadir micronutrientes claves a la ecuación.
Actividad física para prevenir el síndrome de Burn Out
Sí, te entiendo, no tienes tiempo ni para respirar, cómo vas a tener tiempo para hacer ejercicio en tu día a día. Lo primero que deberías plantearte es si en tu rutina habitual se podrían insertar pequeños paseos, por ejemplo. Algunos momentos del día en los que te levantes de la silla y el ordenador para caminar diez minutos alrededor de tu casa, en tu azotea, o alrededor de tu bloque. Otra opción interesante sería adaptar tu oficina para incluir alguna máquina de pedaleo debajo de tu escritorio o incluso una cinta caminadora con inserción de tu ordenador de trabajo.
Ahora sí, ya para nota, si consigues que en tu empresa se organice algún equipito de fútbol, básquet, pádel, senderismo o cualquier cosa para aunar a los empleados y hacer actividad a todos juntos durante una jornada, tienes mi total y absoluta admiración.
- Pero Dani, si apenas tengo tiempo para comer algo entre reuniones, ¿cómo voy a pensar en comer más sano o en hacer deporte?
- La cuestión no es esa mi querido Nutri Hacker, la cuestión es… ¿Cuánto vas a durar al frente del cañón, llevando ese ritmo de vida? Y como decía la DGT, “más vale perder un segundo en la vida que la vida en un segundo”.
Preguntas frecuentes (FAQs)
1. ¿La alimentación puede realmente prevenir el síndrome de burnout?
Sí, una alimentación adecuada puede desempeñar un papel importante en la prevención del síndrome de burnout. Los nutrientes que obtenemos de los alimentos influyen en nuestra energía, estado de ánimo y capacidad para hacer frente a cualquier situación difícil de la vida..
2. ¿Qué alimentos debería evitar para prevenir el síndrome de burnout?
Así mismo, es recomendable limitar el consumo de cafeína y azúcar, ya que un consumo excesivo puede tener efectos negativos en los niveles de energía(literalmente los dispara y tumba) y el estado de ánimo.
3. ¿Qué alimentos pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad?
Por otro lado, alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, como el salmón, las sardinas, el atún(cualquier pescado azul) y las nueces, así como alimentos que estimulan la producción de serotonina, como los plátanos, las espinacas y el chocolate negro, pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.
4. ¿Es recomendable buscar asesoramiento profesional para adaptar la alimentación?
Por supuesto que sí, cada persona tiene necesidades nutricionales individuales. Por lo que es recomendable buscar el asesoramiento de un profesional de la salud, como un dietista o nutricionista, para adaptar la alimentación de manera adecuada.
5. ¿Existen otros factores además de la alimentación que pueden prevenir el síndrome de burnout?
Sí, además de la alimentación, es importante mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, practicar técnicas de manejo del estrés(como la meditación o el mindfulness), hacer ejercicio de forma habitual y priorizar el autocuidado para prevenir el síndrome de burnout.
6. ¿Qué colectivos profesionales son los más sensibles a sufrir este síndrome?
Según Luis Fernández Ríos, doctor en Psicología y profesor titular en la Universidad de Santiago de Compostela: «Docentes, personal sanitario, cuerpos de seguridad del estado, personas que trabajan en atención al cliente, trabajadores en tiendas varias, trabajadores sociales, etc. En general, todas aquellas profesiones que implican una relación interpersonal directa y continuada en el tiempo con el «cliente». También se puede incluir el personal de administración y servicios de organizaciones o instituciones públicas y privadas«.
Lo que no excluye a: ejecutivos, CEOs o project managers con mucha responsabilidad que también podrían verse afectados/as.
Conclusión
Para terminar, me gustaría aclarar, que el síndrome de burnout puede tener un impacto significativo en tu salud y bienestar de las personas, llegando a provocar enfermedades mortales como el cáncer. Sin embargo, adoptar una alimentación y nutrición adecuadas puede desempeñar un papel importante en la prevención de este síndrome. Mantener una dieta equilibrada, consumir suficientes vitaminas y minerales, regular el consumo de cafeína y azúcar, e incorporar alimentos que promuevan la salud mental son acciones clave para cuidar tu salud y prevenir el agotamiento. Recuerda que cada persona es única, por lo que es importante buscar asesoramiento profesional para adaptar la alimentación a tus necesidades individuales.
Pese a todo, la alimentación, la nutrición, la hidratación y la actividad física contra el Síndrome de Burnout, sólo son una parte del tratamiento. Sigue siendo crucial que aprendas a manejar la carga de trabajo y estrés, de manera que no quemes los neumáticos en la primera carrera…
Por último, si este artículo te ha sido aunque sea de un poquito de utilidad, por favor, COMPÁRTELO con cualquier persona, animal o bestezuela que creas que lo puede necesitar.
Referencias
- María Erika Ortega-Herrera, Socorro Herrera-Meza, et al. INVESTIGACIONES EN COMPORTAMIENTO ALIMENTARIO Reflexiones, alcances y retos; Síndrome de Burnout y su relación con los hábitos alimentarios. Red Internacional de Investigaciónen Comportamiento Alimentario y Nutrición(RIICAN). Noviembre 2018.
- García-Molina C, Satorres-Pérez M, Crespo-Mateos AP, Quesada Rico JA, García-Soriano L, Carrascosa-Gonzalvo S. Prevalencia del síndrome de burnout en profesionales de medicina y enfermería de Atención Primaria en centros de salud acreditados para Formación Sanitaria Especializada de dos áreas de salud de Alicante. Aceptado para su publicación el 11 de enero de 2022.
Daniel Fresnillo Genafo
Tu nutricionista online
Posdata:
¡DESCÁRGATE GRATIS la Lista de la Compra Saludable!
VENTAJAS:
- Mejorarás tu alimentación
- Bajarás de peso
- Fortalecerás tu salud