Una de las preguntas más habituales cuando a una/o nos diagnostican diabetes tipo 2 es, ¿Qué puedo comer?
¿Significa que nunca más voy a poder comer dulces? No, querido lector, aún que tengas diabetes tipo 2, claro que puedes, pero tienes que ir con más cuidado. Hay algo llamado el índice glucémico de los alimentos, que «mide» de forma aproximada cuanto va a subir tu glucosa en sangre después de que te lo comas.
Odio con todas mis fuerzas cuando se le prohíbe a una persona comer un alimento en concreto o un grupo de alimentos. No me malentiendas, a veces realmente está justificado, por ejemplo, en el caso de un insuficiente renal, restringir los alimentos ricos en sal. En este caso ocurre lo mismo. Los diabéticos pueden tomar alimentos con «azúcar», es decir, dulces. Pero siempre se tomarán teniendo muy en cuenta su nivel de azúcar en sangre.
¿Puedo comer de todo, aunque tenga diabetes tipo 2?
Venga, te dejo que comas de todo, pero prométeme que a los hidratos de carbono los vas a llevar bien controlados y mirarás el índice glucémico. Aquí te dejo una sencilla imagen de los compañeros de la Sociedad Mexicana de Salud Pública.
En esta imagen tenemos una idea general de que alimentos deben estar más «restringidos» y cuáles son un poco más de «libre consumo». Como decía anteriormente, el azúcar que podemos encontrar en los dulces y otros alimentos procesados, es con la que más cuidado debemos tener. Los refrescos, aunque sean light, contienen una gran cantidad de azúcar por lo general. Incluso algunas bebidas vegetales (leche de avena, almendras, etc.) pueden llegar a tener cantidades exageradas de azúcar.
Te preguntarás, ¿Todas las bebidas vegetales deben de estar restringidas? Ni mucho menos, solo las que se pasen de azúcar. He llegado a ver bebidas de soja con hasta 10g de azúcar por cada 100ml de bebida… ríete tu de los Donuts…
Si tenemos asignada una cantidad de insulina que administrarnos, deberemos consultar con nuestro nutricionista o médico cómo debemos adaptar esa cantidad de insulina externa a la ingesta de dulces.
¿Puedo comer todas las frutas y verduras que quiera, aunque tenga diabetes tipo 2?
Sí y no. ¿Por qué? Si te fijas en la imagen de ejemplo, te darás cuenta de que hay vegetales situados en distintas categorías. Voy a ser un poco extremo ¿vale? ¿lista/o?
La manzana, por ejemplo es un alimento con un índice glucémico bajo (color verde), pero por contra, la sandía es un alimento de índice glucémico alto ,está en la parte alta de la tabla (rojo). Lo que esto quiere decir es que un alimento como la sandía o las uvas, por ejemplo, van a hacer que nuestra glucosa en sangre suba más rápido y nos pueda dar algún sustillo que otro. Si no te aclaras con tanto alimento que existe, siempre puedes consultar a tu nutricionista online de confianza y pedirle una dieta equilibrada adaptada a tus gustos. El equilibrio en una dieta saludable es muy importante, como te he comentado en otros posts de este mismo blog.
La interacción entre los distintos nutrientes y cómo los organices durante tu día es una pieza clave para mantener a la glucosa en los niveles adecuados para que no tengamos imprevistos. Por eso lo de que sigas una dieta equilibrada no lo digo por ser tu peor pesadilla, si no porque es un herramienta realmente útil.
Lo hidratos de carbono deben de estar distribuidos con cierta estrategia a lo largo del día y en función de la actividad física. En el caso de la diabetes tipo 2, el cuerpo nos va a suministrar cierta cantidad de insulina, pero mejor si no se la pedimos toda de golpe para que pueda dar abasto.
¿Puedo comer toda la carne y grasa que quiera, aunque tenga diabetes tipo 2?
No, lo siento, se que no te lo esperabas pero no. Abusar de la carne no es bueno. Está claro que con respecto al nivel de glucosa, no va a afectar el que te comas un chuletón, «Teóricamente«. Que sí que afecta aunque no sea significativo para meterlo en la tabla del índice glucémico. Las proteínas y la grasa no te van a volver loca/o a la hora de controlar tu glucosa en sangre pero si tu sobrepeso u obesidad causantes de tu diabetes tipo 2. En muchos casos, cuando llevamos una dieta basada en comida saludable y hacemos ejercicio de forma habitual, podemos remitir nuestra diabetes tipo 2. Con lo cuál es importante no abusar e ningún grupo de alimentos, sea cuál sea.
Teniendo también en cuenta que el exceso de grasas saturadas te puede traer problemas a nivel cardiovascular o empeorar los que ya tienes… Con lo cuál, no es una buena idea pensar que la carne, por ser básicamente proteínas y grasa no va a afectar a nuestra salud porque no modifica agresivamente nuestro niveles de glucosa.
Conclusiones
¿A qué no adivinas que te voy a decir? Pues sí, dos tazas de dieta equilibrada y una de estrategia. Llevar una alimentación de diabetes tipo 2 puede ser fácil, si sabes como. Si aprendes a elegir bien los alimentos y haces un poquito de DEN… todo será mucho más fácil. El hecho de controlar la ansiedad nutricional y ordenar tus cantidades de alimentos en cada comida, ya es un gran logro.
Daniel Fresnillo Genafo
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